Acreditaron a participantes en diplomados de astronomía y nanotecnología

En acto formal académico, alrededor de 40 estudiantes fueron acreditados en la primera cohorte diplomados de nanotecnología y astronomía, una oferta de enseñanza novedosa en el
Táchira y Venezuela.

Con toga y birrete, los participantes recibieron con orgullo el diploma que los certifica, no solo como depositarios de un saber que va a ser requerido por el mundo del mañana, sino de haber hecho parte de una experiencia novedosa impulsada por el Colegio Domingo Savio, y con el aval universitario de la Universidad Latinoamericana y del Caribe.

Precisamente la actividad fue presidida por el rector de la mencionada casa de estudios superiores, Dr. Elmo Bell Smythe, quien se mostró muy satisfecho por abrirse esta posibilidad
de estudios de extensión universitaria para cualquier persona, sin importar edad ni nivel de preparación, en nanotecnología y astronomía.

Smythe se mostró muy emocionado por este trabajo conjunto entre la Universidad Latinoamericana del Caribe, el Instituto Universitario de Tecnología "Rufino Blanco Fombona, y el Colegio Domingo Savio en función de innovar en favor de todos aquellos con deseos de actualizarse en el mundo de la ciencia.

Afirmó Smyte que “con educación todo es posible, y sin educación no hay futuro. Estoy completamente seguro que el Táchira a partir de la filosofía NARbed puede alcanzar el sueño
de conquistar el espacio, y se puede lograr con la participación de las 68 universidades del país”

Cerrar las distinciones entre la educación superior y la educación secundaria y primaria, enfocándolas para poder manejar un proyecto común que de prioridad al impulso de la
ciencia y la tecnología en Venezuela, constituye uno de los principios de NARbed admirados por el rector de la ULAC.

“Lo que está pasando en el Táchira es un ejemplo para todo el país, porque cuando hablamos de educación es una sola”. Además del reconocimiento al ilustre visitante, se entregaron reconocimientos a los facilitadores de los diplomados a los ingenieros Javier Moncada y Hoffman Villalta, quienes desde como especialistas en la materia han sido pilares en la implementación del proyecto NARbed en el Colegio Domingo Savio.

Un amplio espectro generacional hizo parte de los diplomados, y muchos de los participantes pudieron incluso realizar ambos simultáneamente, disfrutando de una metodología que ha logrado transmitir de la manera más clara y sencilla posible, conocimientos que para muchos
pueden parecer imposibles de asimilar por el intelecto.

Al tomar la palabra, el CEO del Colegio Domingo Savio, Víctor Cárdenas, hizo una profunda reflexión sobre lo lejos a que ha llegado la filosofía en tanto no solo ha circunscrito a una institución en particular, pues se propone a cualquier estudiantes y profesional con ansías de
la sabiduría que demandará el mundo de hoy.

Felicitando a los participantes por tan gran paso en su camino de formación, sostuvo que “es un sueño, sí: Yo creo que el Táchira se merece este tipo de educación. Vamos batallando
contra la formalidad. No nos hemos conformado con las 6 materias que nos presenta el currículum, sino que lo reforzamos con áreas como nanotecnología, astronomía, astrofísica,
física cuántica, robótica, que contribuyen a fortalecer y hacer más robusta la comprensión de lo que los niños y niñas en estos momentos ameritan para el futuro de Venezuela”.

Al finalizar el evento, Cárdenas recordó que está en pleno proceso la segunda cohorte de los diplomados de nanotecnología y astronomía y quienes deseen mayor información pueden
hacerlo a través de las redes sociales del Domingo Savio Filosofía para el futuro

A partir de la concepción de la filosofía NARbed, que contempla la incorporación de temas tan aparentemente álgidos como la nanotecnología, la astronomía, la robótica y el bilingüismo en apoyo a la investigación estudiantil, por parte de los doctores José Antonio Pulido y Víctor Hugo Cárdenas se puso de manifiesto que no se trataba simplemente de enriquecer con contenidos de orden científico la malla curricular, pues ante todo se necesitaba cambiar la manera en que se impartía el saber.

Porque para formar a los científicos que necesita Venezuela, no basta acercarlos y tomar lecciones tediosas y coercitivas sobre determinados conceptos; imperativo es que adopten el
amor al conocimiento, la curiosidad, la inventiva, y sobre todo, la conciencia critica característica de los más destacadas personalidades de la ciencia, que les permita descubrir por si mismos cómo surgen los principios de las cosas

Entonces lo que partió como una inducción a lo interno del Colegio Domingo Savio, se fue transformando en una actividad de extensión única en el país al cual se han adherido
licenciados allende la institución e incluso estudiantes de niveles secundaria con gran curiosidad por la nanotecnología y la robótica.

Como aclaran los gestores de NARbed, José Antonio Pulido y Víctor Hugo Cardenas, directivos del Colegio Domingo Savio, más allá de defender si se trata o no de una novedad, lo trascendental de la filosofía educativa consiste en que se adapta al entorno tachirense, suelo fértil para tal idea pues el estado históricamente ha demostrado su amor al conocimiento, y se puede proyectar nacionalmente; y tan importante como este hecho, que pese a todas las adversidades que ocurren en el país SI ES POSIBLE transformarla en una realidad como puede constatar cualquier persona que visite la institución educativa y constatar la aplicabilidad de NARbed, traducida en la satisfacción de los estudiantes y representantes.