Ejercicio fisico

Ejercicio fisico

La actividad física tiene un impacto positivo en las bacterias beneficiosas del intestino, las cuales juegan un papel crucial en la digestión, la absorción de nutrientes y la salud inmunológica

 

Más allá de la estética y la búsqueda de un cuerpo tonificado, el ejercicio físico juega un papel fundamental en el mantenimiento del bienestar integral, incluyendo la salud digestiva y el metabolismo.

 

Diversos estudios han demostrado que ejercitarse regularmente promueve una serie de beneficios para los sistemas digestivo y metabólico. Incluso hacerlo en pequeñas cantidades pueden tener un impacto positivo.

 

la actividad física no solo ayuda a las personas a mantener un peso estable o saludable, también se ha descubierto que el deporte puede ayudar a aumentar el metabolismo y acelerar los procesos digestivos, evitando la sensación de llenura y ayudando a la motilidad intestinal, lo cual permite prevenir posibles condiciones o patologías”.

 

El ejercicio físico ayuda a activar bacterias beneficiosas en el intestino. “Se sugiere realizar alrededor de 2 horas de ejercicio intenso máximo, evitando superar las 3 horas para no afectar la salud”, indicó. Para personas que se inician en el ejercicio, se recomienda comenzar con 30 minutos de cardio y 60 minutos de pesas, aumentando gradualmente la intensidad y duración.

 

Influencia

 

  • Mejora la motilidad intestinal y la digestión: El ejercicio regular estimula los movimientos peristálticos del intestino, facilitando el tránsito de los alimentos y previniendo el estreñimiento. Además, contribuye a la secreción de jugos digestivos, mejorando la absorción de nutrientes esenciales.

 

  • Regula el apetito y el control del peso corporal: La actividad física aumenta la producción de leptina, una hormona que promueve la sensación de saciedad, y disminuye la producción de ghrelina, la responsable de estimular el hambre.

 

  • Optimiza la sensibilidad a la insulina y el control del azúcar en sangre: El ejercicio regular convierte tus células en superheroínas, haciéndolas más sensibles a la insulina, la hormona que regula el azúcar en sangre. Esto significa que tu cuerpo podrá controlar mejor los niveles de glucosa, previniendo la diabetes tipo 2 y otras enfermedades metabólicas.

 

  • Fortalece la microbiota intestinal: Tu intestino alberga un universo de billones de bacterias, conocidas como microbiota intestinal. Estas bacterias no solo te ayudan a digerir los alimentos, sino que también influyen en tu estado de ánimo, tu sistema inmunológico y tu metabolismo. El ejercicio físico promueve el crecimiento de bacterias beneficiosas y reduce la presencia de bacterias dañinas, optimizando el funcionamiento de tu microbiota intestinal.

 

  • Reduce el riesgo de enfermedades gastrointestinales: El ejercicio regular te protege contra una variedad de enfermedades gastrointestinales, como el síndrome del intestino irritable, la enfermedad de Crohn y el cáncer de colon. Mantenerte activo te ayuda a prevenir estas afecciones y a disfrutar de una mejor salud digestiva.

 

Tipos de ejercicio

Para optimizar la función gastrointestinal y el metabolismo, se recomienda una actividad moderada, entre 30 y 60 minutos de actividad física cardiovascular, como caminar, correr, nadar o andar en bicicleta, la mayoría de los días de la semana.

 

Los entrenamientos con pesas o ejercicios de resistencia también son fundamentales, deben realizarse al menos dos veces por semana. Para obtener los mejores resultados, se recomienda combinar el ejercicio cardiovascular con el de fuerza.

 

Entre otras recomendaciones se aconseja consultar con un médico o fisioterapeuta antes de iniciar un programa de ejercicios.