Brasil se ilusiona con el hexacampeonato
Veinte años sin conquistar un Mundial es demasiado tiempo para Brasil, un país que -como dijo el Rey Pelé- “come, duerme y bebe fútbol”. La selección con más títulos en la Copa del Mundo (1958, 1962, 1970, 1994 y 2002) es, además, la única que ha participado en todos los campeonatos y la que cosecha más triunfos (73 en 109 partidos).
La “Canarinha” llega a Catar repotenciada, con una plantilla más completa que en los últimos torneos y con jugadores en un pico de rendimiento que les convierte en el máximo candidato para levantar la copa.
Neymar vive un buen momento en el PSG y parece haberse preparado para llegar a tope al Mundial. A su lado estará un bloque que luce sin fisuras en todas las líneas, con zagueros experimentados: Marquinhos (PSG) y Thiago Silva (Chelsea); mediocampistas que aportan equilibrio: Casemiro y Fred (Manchester United); y delanteros de clase mundial: Gabriel Jesus (Arsenal) y Vinícius Junior (Real Madrid), entre otros.
Suiza funciona como un reloj
Suiza no tiene los nombres rutilantes de Brasil, pero cuenta con un equipo compacto que no será fácil de vencer para sus rivales. En Catar participarán por quinta ocasión consecutiva en el Mundial y en las últimas dos ocasiones han logrado superar la primera fase, como también lo han hecho en las dos Eurocopas más recientes.
Caras conocidas en los torneos internacionales como Xherdan Shaqiri (Chicago Fire), Granit Xhaka (Arsenal), Haris Seferović (Galatasaray) y Ricardo Rodríguez (Torino), todos mayores de 30 años y que aportan experiencia a una selección que ocupa el puesto 15° en la clasificación mundial de la FIFA.
Serbia: Un ataque de lujo
Pocas selecciones en el mundo se pueden dar el lujo de contar en su plantilla con la pólvora que tiene Serbia en el ataque. Dušan Vlahović, por quien la Juventus pagó cerca de 75 millones de euros a comienzos de este año, comanda una la línea ofensiva en la que también está Aleksandar Mitrović (Fulham), aunado al talento de Filip Kostić (Juventus) y Dušan Tadić (Ajax).
En su tercer Mundial como nación única, confía en avanzar por primera vez a octavos de final, aunque han tenido poca suerte al quedar emparejados en el que luce como el grupo de más nivel en el campeonato.
La alegría de los “leones Indomables”
El planeta fútbol se enamoró de Camerún en Italia 1990, cuando la generación que comandó Roger Milla llamó la atención con su fútbol vistoso y entretenido. Desde entonces, no han podido igualar aquella actuación histórica que los llevó hasta cuartos de final, y en esta ocasión tendrán que lidiar con el favorito Brasil y dos selecciones europeas compactas.
La asignatura pendiente del combinado que dirige el exinternacional Rigobert Song sigue siendo el orden defensivo. Por el contrario, en la delantera cuentan con veteranos de buen nivel como Maxime Choupo-Moting (Bayern), Karl Toko Ekambi (Lyon) y Vincent Aboubakar (Al-Nassr).
Pronóstico:
- Brasil: el favorito para todas las casas de apuestas. El jogo bonito está de vuelta.
- Suiza: tienen la experiencia para sumar los puntos que los lleven a octavos de final.
- Serbia: ostentan un ataque de primer nivel, pero su carácter a veces les juega en contra.
- Camerún: animarán cada partido, pero les costará clasificar en un grupo muy complicado