La frontera de Venezuela con Colombia agoniza ante la crisis humanitaria compleja aunado a la pandemia COVID19

La frontera de Venezuela con Colombia agoniza ante la crisis humanitaria compleja aunado a la pandemia COVID19.

Tras haber sido la frontera más dinámica de América, denunció el activista de FundaRedes Carlos José Rodríguez, que actualmente se ha convertido en un escenario adverso, donde las instituciones públicas se encuentran absolutamente colapsadas de cara a la atención de aproximadamente 2.400 connacionales; esto sin tomar en cuenta o incluir a los venezolanos que se encuentran en el terminal de pasajeros; cúmulo que suman más o menos 1.400 personas.

Afirmó Rodríguez que mientras que, al otro lado, en La Parada –Colombia-, al menos 480, aguardan en un hotel, de nombre “Villa Antigua”, a la espera de que el gobierno venezolano les deje ingresar a su país.

Destacó el activista de FundaRedes, que este escenario aumenta cada día con la llegada de autobuses al puente internacional Simón Bolívar. Los venezolanos que retornan a su país, se encuentran con un proceso que incluye: el aislamiento en el terminal, para posteriormente ser trasladados a instituciones públicas de esa zona; y enseguida cumplir con los 15 días de cuarentena.

Dijo Carlos José Rodríguez, quienes habitan como residentes en la frontera, experimentan zozobra y pánico debido a esta pandemia del COVID 19. Ante los retornados que podrían ser trasladados luego para la aplicación de test médicos al aeropuerto internacional Juan Vicente Gómez, donde se le solicita en este caso, dar apertura; pues éste se encuentra ubicado entre los municipios Bolívar y Pedro María Ureña, y de esta manera lograr un retorno a sus estados de origen.

Daños al patrimonio

Explicó el vocero de FundaRedes Carlos José Rodríguez, a un lado se dejan las instalaciones y el patrimonio público, tales como: mesas, sillas de aulas. ¿Y entonces quién responde por estos daños?,  Acaso lo hace el Misterio de la Zona Educativa Táchira. Sin embargo, se impone un aislamiento absoluto, para la población de San Antonio y Ureña, donde no se cierre el punto de control Peracal de la Guardia Nacional. Al tiempo de que queda aislado el estado Táchira, por ambos lados.

Indicó Rodríguez que aunado a esto, el régimen de Nicolás Maduro, plantea un horario de restricción, donde los habitantes puedan salir a realizar las compras, desde las 10 a.m. hasta las 4:00 pm.

Aseveró Rodríguez que Freddy Bernal, ha dado un mensaje desde los caminos verdes comúnmente conocidos como trochas -pasos ilegales-; manifestando que serán detenidas las personas que pasen de forma ilegal a Venezuela, y serán puestos a la orden de los tribunales correspondientes.

Recordó Carlos José Rodríguez que la incompetencia de los militares que están que se encuentran destacados en la zona limítrofe, donde resguardan las trochas o pasos ilegales. Por lo cual, es preciso preguntarse ¿a qué acuerdo llegaron con las personas que pasan o transitan diariamente, para comprar del lado colombiano: medicina, gasolina, medicamentos, gas doméstico?.

Recordó el activista de FundaRedes, que los habitantes de la frontera, se están acostumbrando a este tipo de racionamientos que son cada vez más intensos, y van desde 9 a 12 horas de cortes; en la mayoría de las ocasiones, no programados. Ante esta realidad, la población, cada día más experimenta las pérdidas de alimentos, precisamente frente a la crisis eléctrica y cortes desmedidos, convirtiéndose en una forma notoria, en la cual el gobierno, tiene preferencia por algunos sectores, impidiendo el funcionamiento de las cocinas eléctricas frente a la falta de gas doméstico, y el costo alto costo que representan los cilindros, llenos para las comunidades de a pie.

Nota de prensa