Torero Marco Perez

Torero Marco Perez

La corrida de cierre del Carnaval Taurino de América en Mérida, Venezuela, fue una tarde para la historia producto del éxito alcanzado por sus actuantes, los toreros Alejandro Talavante, Jesús Enrique Colombo y el novillero Marco Pérez, no así para el caballero rejoneador Francisco Javier Rodríguez.

Alejandro Talavante

El diestro de Badajoz se presentó por segundo año consecutivo ante la afición merideña, que casi llenó el coso andino, dejando en la pañosa, en cada una de sus actuaciones una estela de gran factura, de profundidad, recursivo, artístico, templando, bajando la mano con mucha clase, calidad y con gran solvencia, la misma que demostró en los aceros  y que le valieron los premios, desorejado por partida doble a cada uno de sus toros.

Jesús Enrique Colombo

El máximo representante internacional de la tauromaquia nacional, pechó con los toros más complicados de la ganadería de Don Juan Bernardo Caicedo, no se sintió a gusto, pues los bureles difíciles por bravos y encastados descolocaron al diestro nacional, quien no por eso se amilanó, sino por el contrario fue voluntarioso, entregado y por supuesto efectivo con el acero lo que le valió para el corte de una oreja de su primer rival.

Las ganas de triunfo y de agradar de Jesús Enrique Colombo, le llevó a regalar un toro, perteneciente este a la ganadería de Rancho Grande, un toro chico al cual el venezolano le instrumentó una faena de importancia, con pases artísticos y de gran conexión con el público, que luego del estoconazo solicitó los trofeos, entregando Usia solo una oreja.

Novillero Marco Pérez

Se marcaba la última del ciclo taurino merideño con el debut del novillero salmantino Marco Pérez, quién dejó en la arena de la «Román Eduardo Sandia» una estela fílmica de gran toreo, de buenas maneras de un andar de clase con variedad, demostrado que tiene un camino andado, que tiene la cabeza puesta y los objetivos claros en esto del planeta de los toros.

Marco Pérez dejó una importa, su tauromaquia deleitó y extasió a la afición en cada lance, en cada muletazo, sus novillos también mostraron clase, recorrido, fijeza y gran nobleza, condiciones que fueron consideradas por la Presidencia de la Comisión Taurina Municipal y les fue otorgado el indulto a ambos utreros, generando incluso una polémica en el perdón de la muerte al segundo novillo, pero llevándose el debutante y la actual sensación mundial del escalafón menor, las cuatro orejas simbólicas en sus alforjas.

 

Ficha del festejo:

 

Ganadería: Juan Bernardo Caicedo (colombiana) bien presentados en peso y edad, nobles, bravos y encastados en distintos niveles.

Toro de El Prado para Rejones: bien presentado, encelado y de buen tranco para el lucimiento del caballero rejoneador.

Toro de Rancho Grande: Toro de Regalo: chico, pero noble.

 

Francisco Javier Rodríguez (usanza Cordobesa) palmas luego de un aviso.

Alejandro Talavante (Burdeos y Oro) 2 orejas y 2 orejas

Jesús Enrique Colombo (Gris plomo y oro) oreja, palmas y oreja en el de regalo

Marco Pérez (celeste y oro)  2 orejas y 2 orejas (simbólicas producto de 2 indultos)